CAMPAMENTOS DE VERANO

Hablo de Judo, porque desde hace catorce-quince años soy aficionado al judo, pero no un aficionado por obligación, dejo bulto (niño-niña) y a la hora cojo bulto. Yo he dejado bulto, me he sentado y he visto como el bulto evolucionaba día a día y conforme ha ido aprendiendo con la práctica, yo he ido aprendiendo con la observación. Ya en los primeros tiempos había aficionados y judocas adultos que se preguntaban porque yo pretendía saber más que algunos otros padres e incluso  judocas de medio pelo; la respuesta es fácil, a mi me daban los créditos porque aprendía en la presencia mientras otros la presencia la hacían en el bar, la espera vamos.
Ahora que está terminando la temporada se publican Cursos y Campamentos de verano, para judocas. Hay algunos muy prestigiosos como el de Torrelavega, Salamanca, Madrid, etc. y otros que tratan de abrirse camino con entusiasmo y apoyados por organizaciones fiables como el de Donibane.
Todos estos campamentos son en general fiables y son idóneos para los judocas con ilusión, pero si lo que se pretende es llevar a hijos distraidos a pasar el rato, mejor que les apuntéis a los cursos de chiquipark.
Para seguir aprendiendo entro en la web del Gimnasio Zarza de Salamanca, donde mi hija entrena desde hace meses y del que habla maravillas tanto de las clases, como del ambiente, de senseis  con 4º y 5º dam los jóvenes y los compañeros-as. Me surge la idea de comparar el gimnasio de Salamanca y el de Logroño y la verdad por lo poco que he podido observar no hay comparación. Es como comparar una única clase de una escuela de pueblo donde los níños de cuatro años comparten horario con los nenes de quince y encima el profesor no ha terminado la carrera, con una clase de un curso alto en la ciudad. Si tienes que elegir ¿a quien elijes?.