sábado, 4 de febrero de 2012

DONDE PUEDO

Trato de entrar en el blog de linajudo.blogspot.com/ para publicar unas fotos de la sociedad gastronómica  de Nacho donde mañana comeremos un menú bocata de cardinale. Hoy hemos ido a comprar las provisiones el titular,  Hector, Javier y yo, cunado dejabamos las viandas hemos visto la instalación y a mi de verdad, en este caso la realidad ha superado ampliamente a lo imaginado, para bien.
Después de un montón de intentonas he conseguido suprimir una serie de dibujos perfiles que a las interesadas no les habían gustado demasiado y , no se que leches he tocado pero ahora no consigo ir a las entradas, por lo que las fotos las publico en Diteajudo, que es donde puedo.
Hoy Alba ha competido en un campeonato de Castilla y León y ha quedado medalla de oro. También ha tenido un combate libre con una judoca invidente que para compensar era de un peso superior al de Alba. En el tiempo normal han teminado "iguales" y por decisión final han dado ganadora la la otra chavala. Me habla Alba de la experiencia que le ha significado un combate de estas características y aunque ha hecho en alguna ocasión randoris con Javier, me dice que para repetir está situación le es imprescindible prepararse. Me comenta la dificultad de que te obliguen a mantenerte permanetemente agarrada, porque si no es así se para el combate y vuelta a empezar; tampoco existe el shido porque en el ánimo de la contrincante no esta el mantener alejada a su competidora, pero en realidad es así.
Como final me dice que la joven invidente, no obstante es una gran competidora y está en el ranking nacional, como Javier Uriarte. Un aplauso para personas como estos dos, que han sabido sobre ponerse a circunstancias y triunfan en lo que se proponen.




Estoy sensibilizado porque el miércoles tuvimos una reunión en el salón del administrador, los propietarios de los pisos que forman la comunidad de dos portales. Uno de los vecinos es invidente acaecido, no nacido, y tuve el placer de acompañarle a la vuelta a casa en un paseo nocturno. A priori tenía una serie de prejuicios y luego resultó  que salvo que apoyar su brazo en mi brazo, del resto no me enteré porque hasta contaba detalles de cuando veía y hablaba como un gran lector, que lo era, en Braile.

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