OTRAS COSAS DE LA VIDA

De judo y de otras materias

1.- He ido a visitar al presidente de la federación en su gimnasio, para hablar de algunas cosas relacionadas con el judo. Está enfermo y por la hora aprovecho para ver una de las clases que da su padre, Pedro Fernández a los cachorritos de 7 a 11 años. Como soy aficionado a la estadística enseguida me llama la atención que justo hay el doble que en tiempos de Alba con esa edad. 42 alevines que no está nada mal. Veo que el piedra en la antigua fase denominado por el sensei como el "ojitos" se ha reencarnado en el llamado ahora "bicho". La dedicación y concentración de la etapa antigua se mantienen en la persona del benjamin "Juan". Es una delicia ver a Juanito con siete años hacer randoris con chavales que le sacan la cabeza, a los que derriba constantemente y ante la rabia de estos repetirlos " que hacemos judo".

2.- Me comenta un amigo de antiguo que la seguridad en España está haciendo aguas, que sucesos que eran impensables hace una década se están convirtiendo en algo frecuente, no me extraña que ocurra mientras el que presume de como le temen porque sabe todo de todos, el capo Rubalcaba, juega a que se mee en los pantalones el marcado por él, con solo mirarlo.

Y no crean que yo no he pasado por situaciones difíciles a lo largo de mi vida, dos por ejemplo:

- En mi infancia tuve un amigo al que solo veía en mis visitas veraniegas al pueblo, pero del que recordaba sus actuaciones rayando siempre en la amenaza. Salí con su hermana en un par de ocasiones pero lo dejé, entre otras cosas, porque no me fiaba que su hermano apareciese en Madrid, con una escopeta. Pasaron unos años y mira si hay taxis en Madrid que un día monto en el que conducía el interfecto, después de una breve charla nos reconocimos y me comentó que era policía nacional y que conducía el taxi como complemento para tratar de vivir bien. A mi nunca me ofreció ninguna confianza. Años más tarde uno de mis hermanos, hablando de la infancia, me dijo que le habían condenado a veinte años de cárcel porque había asesinado al presidente de la comunidad de una urbanización. Me comentó que había sido dado de baja en la policía y que el dueño del taxi le había echado después de juicios por su actuación problemática grave con los clientes. Se había colocado como conserje y tenía amedrentados a los vecinos. En concreto el presidente le afeó que no hubiese limpiado la piscina, este le contestó relajado que iba a por la herramienta necesaria, volvió con una pistola, le disparó en dos ocasiones y se quedó esperando tranquilamente a que viniesen sus ex-compañeros.

-Durante una guardia nocturna en un cuartel situado en los aledaños de la estación de Atocha, fui apuntado durante más de dos horas por un teniente descentrado que era reenganchado de la guerra civil y que veinte años más tarde aun creía ver enemigos paseando por Madrid.

Que una persona que ha vivido situaciones parecidas a las que he explicado sin que hayan hecho mella en él, estén ahora preocupados, es para ponerse en alerta.

3.- Desde hace tiempo conocía la teoría del autobús de los políticos, que es conducido por una calle estrecha que simboliza el trayecto de legislatura. Se trata de desembocar al final de la calle con el bus con los menos desperfectos posibles. Empieza a contar Felipe González, que lleva perfectamente el vehículo (la nación) y desde finales de los ochenta hasta su sustitución por el conductor Aznar, le empieza a destrozar por el lateral izquierdo, parachoques, faro y aleta incluidos. Aznar lo repara y lo deja impoluto a lo largo de su legislatura. Aparece Zapatero y desde el primer día empieza a rozarle por la izquierda, primero en plan gamberro y que una vez que le saca el gustillo no ceja hasta que desaparece todo el lateral. El problema se agudiza porque el interior, que hasta ahora no había sufrido grandes desperfectos, indepedientemente de quien conducía, es esquilmado por las Maites, Pajines, Chacones, Camachos, Salgados, etc. . Vamos que lo están dejando, como decía Alfonso Guerra que no lo va ha conocer y la madre que los parió.

4.- Estoy guardando alguna de la obras que mi hija la artista ha pintado ya hace algún tiempo. Una imitando a un pintor norteamericano de éxito y me gusta. Ahí está.

5.- Desirée está en la etapa final de su carrera y ahora está haciendo pinturas para duplicar con serigrafía. Como tengo la maquinaria y los productos se los prestaré, pero no puedo evitar el visionar el último de los fotolitos que hice de Alba y Ana, a riesgo de ser copiado, lo expongo.