LA PAELLA

Me encuentro con el recién recuperado después de su periplo mauritano, Paco Olivenza; habla y no para de su experiencia en tierras africanas, y hasta creo que ha cogido cierto síndrome de los felices que poco tienen.

Ahora que vuelvo a retomar las artículos basados en el judo y en los judocas, después de un paréntesis preparando diseños de camisetas, no es que tenga mucha demanda, es que la cosa está tan mal que hay que redoblar los esfuerzos para conseguir el 10% de lo que antes de la aparición del parásito Zapatero (creo recordar que en la infancia jugabamos con un insecto semejante a la mariquita -¿ me detendrá la bibi por escribir mariquita?- pero con el cuerpo más alargado) conseguía. Me comentan que parece que soy anti sociata, pero nada más lejos de la realidad, soy anti charlatanes y casi me cae mejor un trilero que estos que se lo están llevando a manos llenas y no están haciendo nada por los votantes y mal gobernados. Soy un liberal convencido con cierta dosis de ácrata, por lo que no creo en las personas que enarbolan una bandera y piden que les sigamos como un artículo de fe y la fe solo para la religión y como algo muy íntimo.

Estoy terminando un resumen de la temporada de judo, que en unos días publicaré.

En el gimnasio siguen los entrenamientos y hay días en los que la afluencia es numerosa para las fechas. Pero es sintomático que los aspirantes que más entrenan son los que a lo largo de la temporada más han despuntado en los campeonatos en los que han participado. Hector sigue con sus planes intensivos de entrenamientos en las chavalas y chavales con posibilidades.

Que bien cocina el padre de Irene. Preparó una paella a la que nos invitó hace un mes. Yo que me precio ante amigos y familiares de ser un buen cocinero de paella, tengo que reconocer que la que nos preparó Nacho estaba muy bien presentada y la degusté con verdadero deleite.

Tenía previsto hacer una serie de fotos de los judocas en los últimos entrenamientos, pero como es imposible reunir a los que tenía en mente, he preparado un poster, que me ha llevado su tiempo, y se lo proporcionaré a los interesados. Lo publico porque es un trabajo del que me siento orgulloso.